Para esta época Mavala propone seis colores para explorar la belleza natural con sus colores inspirados en la Tierra. Son unas tonalidades como la arena, los guijarros y el musgo, caracterizados por su suavidad y claridad.
Desde que lanzaron su primer Mini Color en 1962, los laboratorios Mavala de Ginebra se han centrado en la investigación para crear esmaltes de alta calidad que sean amigables tanto con los consumidores como con el medio ambiente.