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Accidentada Volta a Catalunya 2012

Accidentada Volta a Catalunya 2012

El ganador de la 92º Volta a Catalunya, no estaba entre los favoritos, por lo que se puede decir que llegó, corrió y ganó, cuando en su mente sólo estaba la idea de ganar una etapa, pues se llevó las dos primeras y no se quitó el maillot de líder en los siete días de carrera.

El suizo Michael Albasini, de 31 años, demostró que habría  pocos sprints en esta Volta a Catalunya. El suizo culminó una fuga de casi cien kilómetros  en compañía de otros cuatro ciclistas (los franceses Delaplace y Edet, el luxemburgués Gastauer y el estadounidense Duggan) a los que dejó a 20km de meta, en la ascensión al puerto de Collsacreu (2ª). Entró en Calella con 42 segundos sobre Delaplace, 1’14 respecto a Edet y 1’32 al pelotón.

Los cuatro fugados cogieron seis minutos de avance en sus primeros 25 kilómetros de aventura. Los españoles intentaron controlar la fuga, pero el primero entró en el 50º lugar.

En la segunda etapa, de 161 km, con salida y llegada a Girona, volvió a ganar Albasini, con un tiempo de 3h 52min 07s. y por supuesto conservando el lugar de líder de la general. Prudhomme, director del Tour de Francia y Javier Guillén, director General de la Vuelta a España, quisieron seguir esta etapa en coche, para la organización fue un verdadero honor. La nota negativa vino con la caída de Alejandro Valverde, por culpa de un bidón que se encontraba en el asfalto en la zona de avituallamiento, cuado todavía quedaban 75kms. para la meta, con esta desgraciada caída se le escaparon prácticamente todas las opciones de victoria en la Volta ya que llegó a 2’09” de un primer grupo en el que viajaban todos los favoritos excepto Valverde, Brajkovic y Schleck.

Jordi Simón (Andalucía), Julián Sánchez (Caja Rural) y Cyril Bessy (Saur) fueron los protagonistas de la fuga del día, que llegaron a tener 7’30’’ pero murió en la subida al Alt de La Ganga (3ª) partido en dos, cuando todavía quedaba por delante 43 km para llegar a la meta. Pero el equipo GreenEdge y Omega tiraron con fuerza para anular la fuga, endurecer la carrera y distanciar a Valverde. El murciano fue apoyado por su equipo (Movistar), a pesar de tener todo el cuerpo magullado por la tonta caída, pero al llegar a Alt Dels Ángels (1ª), sólo le quedaba el colombiano  Nairo Quintana que había pinchado justo en el momento que Valverde necesitaba ayuda para reemprender la carrera. En la subida no hubo problemas y tan sólo en la cima se produjo un intento de fuga por parte de tres corredores, que esprintaron para puntuar en la clasificación de la montaña. En la bajada Bradley Wiggins (Sky) y su equipo tiraron con fuerza para poder mantenerse entre a 5 y 10 segundos de diferencia respecto a los tres de cabeza, que fueron neutralizados en el llano de Girona, en la recta final de la etapa y al sprint, Albasini que llegó a ceder unos metros en la subidla a Alt dels Ángels (1ª), un corto, pero intenso puerto de seis kilómetros y a sólo 13 m de la meta,  fue el más rápido y se impuso con autoridad a Cataldo (Omega) y Uran (Sky)

Valverde llegó a la meta mareado, y con 20 segundos más de penalización por seguir a los coches mientras trataba de reducir la diferencia.

La tercera etapa y considerada como la reina, con un total de 210’9 kilómetros entre La Vall d’en Bas y la estación de Port Ainé, tuvo que ser reducida por culpa de la climatología a sólo 155km, sin escalar el Cantó ni llegar a la meta prevista. Frío, lluvias y una gran nevada en la línea de meta forzaron a la reducción de la etapa y, posteriormente, a la anulación de los resultados en su aplicación a la general.

La dureza de la etapa y de las condiciones meteorológicas se vieron reflejadas en los 33 abandonos y seis que no salieron a correr, entre ellos, Alejandro Valverde que ya no tomó la salida por precaución por la caída, Andy Schleck, Basso, Porte, Wiggins, Txurruka y Tiralongo.

En un sprint improvisado, puesto que los corredores no sabían dónde estaba la meta, el eslovaco Brajkovic se adjudicó la victoria. Era el kilómetro 155, en la localidad de Canturri. Albasini mantuvo el maillot de líder, aunque estuvo a punto de perderlo, ya que en el grupo de escapados estaba Golas (Omega-Quickstep) y Cherel (AG2R), que se hubiera situado líder sino se hubiera anulado los tiempos.  Todos los ciclistas llegaron al hotel con una imagen de sufrimiento en sus caras, pasaron frío, estaban casi congelados. Buena parte de ellos consideraron que habría sido más juicioso anular o recortar la etapa desde el principio y lamentaron la tardanza de la organización en tomar una solución.

Sin embargo, en el deporte que más vive de la épica, se recordará la etapa, ya que quedará perpetuada la imagen de los ciclistas llegando a sus hoteles tiritando de frío y la Volta a Catalunya, en su centenario vio cómo la nieve la dejaba sin su etapa reina.

Rigoberto Urán, colombiano afincado en Pamplona, se impuso al sprint de Ascó a su compañero de entrenamientos Menchov, un ruso medio navarro, en la cuarta etapa de la Volta. Rompió un maleficio que duraba cinco años, al ganar esta ronda. El suizo Albasini, que formó parte del grupo de cabeza integrado por 25 corredores, consolidó su liderato.

La etapa, de 199 kilómetros y con una doble ascensión al Coll de Paumeres, la última a 18 kilómetros de meta, dio un gran espectáculo, con ciclistas como el español Samuel Sánchez, Leiphelmer y Menchov, buscaban  acercarse al líder. La fuga de día la protagonizaron Jesús Rosendo (Andalucía), Julián Sánchez (Caja Rural) y el belga Zingie (Cofidis), llegaron a tener más de 4’, pero la fuga murió en la primera ascensión al Coll de les Paumeres, cuando Leipheimer decidió aprovechar la ausencia de las figuras y poner a prueba al líder de la carrera. Fue en la segunda ascensión cuando se formo un grupo de seis corredores. Pedalearon con fuerza, obtuvieron 20’, pero los perseguidores les dieron alcance a 800m.

La victoria se decidió en un apretado sprint  entre un reducido pelotón y Urán se llevó la victoria, que se le resistía  desde que ganara una etapa de la Vuelta a Suiza de 2007.

En la quinta etapa, el suizo Albasini, seguía  líder, ya que mantiene intactos el 1’32”, le quedaban dos etapas, con un relieve asequible. La subida a Montserrat, de primera categoría, a 23 km de la meta, tan sólo el belga Van den Broeck (Lotto), que iba segundo de la clasificación general intentó escaparse, pero con poca fe, ya en la bajada intentó hacer lo mismo, Samuel Sánchez, pero sin ningún resultado. El primer clasificado llegó séptimo  a la meta de Manresa, donde se impuso en un sprint reducido el francés Julien Simon (Saur). El suizo solventó sin sustos la etapa en la que podrían darse más ataques. No en vano hubo movimientos de hombres importantes, como Leipheimer (Omega), Van den Broeck (Lotto) o Nairo Quintana (MoviStar), pero la subida a Montserrat no fue decisiva, y los siete escapados de la jornada fueron prácticamente neutralizados en la cima. Sólo cuatro ciclistas sacaron 23 segundos en la cima al pelotón.

Samuel Sánchez, el campeón de la sexta etapa  y campeón olímpico fue el mejor en Badalona tras un desenlace inesperado cuanto todo conducía a sprint. Samuel (34 años) esperó su oportunidad tras la rápida ascensión a la Conreria, que llevó al grupo directamente hasta Badalona, donde estaba situada la meta. A falta de menos de dos kilómetros, el ciclista del Euskaltel  se escapó de la cabeza en un pequeño repecho y afrontó en solitario los últimos kilómetros, convencido de su victoria. Nadie le pudo atrapar y Sánchez pudo recorrer con tranquilidad  los últimos metros para cruzar muy sonrientes la línea de meta por delante del australiano Davis y el francés Simon, arañando dos segundos  de ventaja que lo catapultaron hasta el segundo puesto de la clasificación general que sigue liderando Albasini.

La 92 Volta a Catalunya concluyó donde se inició la primera edición, un seis de enero de 1911. Los organizadores quisieron rendir un tributo a una carrera histórica.

El suizo del Greenedge Michael Albasini, de 31 años, supo aprovechar  el viento que soplaba a su favor para anotarse la victoria más importante de su carrera.

Ni Valverde, ni Schleck, ni Wiggins, ni Leipheimer, pudo inscribir su nombre en el palmarés  de esta edición, marcada por los abandonos y por la anulación de tiempos en la etapa reina por culpa de la gran nevada.

Su último obstáculo fue la etapa séptima con un final rompepiernas en el que pese a los ataques de Luis León Sánchez (Rabobank) y del más espectacular Samuel Sánchez en el descenso del Tibidabo, acabó en un sprint en el que Julien  Simon hizo valer su estado de forma para llevarse su segundo triunfo parcial, como ya hizo en Manresa, le siguieron Gavazzi (Astana) y Cunego (Lampre), fueron segundo y tercero respectivamente.

El ganador de la Volta, no contaba entre los aspirantes al triunfo, sino que ni siquiera estaba en la lista de preinscritos. La baja de última hora del holandés Peter Weening le abrió la puerta de la ronda catalana, llegó con la intención de ganar una etapa, nada más.

Las clasificaciones séptima y última etapa: 1. Julien Simon, 2. Francesco Gavazzi y 3. Damiano Cunego. General: 1. Michael Albasini con 24.15.45.horas y 2. Samuel Sánchez con 1’30” minutos de más. Montaña: 1.Chris Anker Soerensen con 67 puntos. Por equipos: 1. Garmin.

Gracias a la firma Gaes se pudo participar en la mítica Volta a Catalunya. La compañía desarrollo el juego “Volta Catalunya Gaes, que permitió a cualquier aficionado participar en la carrera creando su propio equipo (siempre con Gaes como patrocinador) y competir con otros usuarios on line.

Montse Carreño, 19 al 25-Marzo-2012