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Amarga derrota

Amarga derrota

Rafa Nadal ya ha vuelto a España, ahora descansar y prepararse para los Juegos Olímpicos de Londres. Debe olvidarse de tropiezo que le costó la pérdida de 1.145 puntos en el ránking e hizo retroceder al balear hasta el año 2005, cuando por última vez, también en Wimbledon, cayó ante Gilles Muller en la segunda ronda. Entre medias, cinco finales en el torneo (dos títulos) en cinco participaciones (no acudió en 2009 por lesión) y 25 torneos de Grand Slam sin caer en tan temprana ronda.

Nadal cayó ante el número 100 del mundo. No perdía ante alguien ningún jugador con  tan baja clasificación desde la derrota frente Nicolas Mahut (106) en 2007, también sobre hierba (Queen's). Nadal cedió ante un tenista que hasta el momento nunca había disputado un encuentro sobre hierba en el circuito mundial.

Lukas Rosol era un jugador desconocido para el gran público, sin apenas bagaje en torneos ATP y más especialista en dobles que en individuales. El checo dejó en Wimbledon su tarjeta de visita al derrotar a Rafael Nadal en segunda ronda en un choque de más de tres horas de acción y cinco sets de pelea. Rafa Nadal sólo había caído tres veces en la segunda ronda de un Grand Slam: una en Wimbledon (2005 ante Gilles Müller) y dos en el US Open (2003 ante Younes El Aynaoui; 2004 ante Andy Roddick). Después de un parón de casi 45 minutos impuesto para cerrar el techo de la pista central y encender los focos de luz artificial, el número dos del mundo perdió el quinto y definitivo set de un encuentro que había comenzado a remontar en la cuarta manga (6-7(9), 6-4, 6-4, 2-6 y 6-4 en tres horas y 19 minutos).
"La única cosa que no entiendo es por qué se tiene que cubrir (la pista). Se acaba la luz natural, pero ¿La luz artificial no se puede encender sin cubrirla? Me parece lo más lógico, jugar con luz artificial y no tener que esperar los 45 minutos", apuntó Nadal tras el encuentro.

Montse Carreño, 28-Junio-2012