Ascenso meteórico de Carlos Alcaraz ganando el U.S. Open

Ambientazo en la pista, casi no sé podía oír el nombre de los tenistas, el futuro del tenis español se hizo presente en Nueva York y a ellos no les ha temblado la raqueta ni las piernas. Era la quinta final de Grand Slam desde 2004 en la que no había ninguno de los tres primeros clasificados en la ATP, se vieron grandes puntos, subidas a la red, globos, carreras de lado a lado, Alcaraz no perdió la sonrisa ni cuando perdía un punto, estaba extenuado pero con hambre de triunfo. Sólo cedió el segundo set, Ruud salió a la pista con la lección aprendida. Carlos supo ganarse a la grada y a su rival.

El español era consciente que tenía doble premio: ganar el último grande del año y primer Gran Slam y convertirse en el número 1 del mundo. Además al ganar se convirtió en el número 1 más joven del tenis masculino de la historia, el tercer tenista desde 2004 que se atrevía a ocupar el primer el trono de los más grandes.

“He soñado desde pequeño ser el mejor y el número 1 y además ver esta copa con todos los ganadores detrás es súper especial”, confesó Alcaraz.

En solo dos años ha pasado de ser el 300 al nº 1 del mundo, pero su pasión de jugar al tenis viene desde chiquitín. Su primer título lo ganó en Croacia en 2021 pero explotó de verdad este 2022 con un mes mágico con el Master 1000 de Miami, El Godó y Madrid ganando a Zverev, Djokovic y Nadal con un punto maratoniano de los suyos y su expresión en la cara lo decía todo, acababa de romper su techo quien se lo iba a decir a este niño, qué siempre soñaba con ser el número 1. Detrás de su éxito se encuentra Juan Carlos Ferrero, qué en su época también fue el 1 del mundo justo el año que nacía Carlos.

El extenista Ferrero piensa sobre sí ha empezado la era Alcaraz “ojala que sí, creo que el primero es el más difícil, al ganar lo estas convencido de que lo puedes lograr otra vez”.

Al día siguiente de alzar al aire su trofeo de campeón del US Open se paseó por el emblemático Times Square para realizar las fotografías oficiales de campeón, lugar que había visitado días antes con su familia como cualquier turista, ahora lo hacía como campeón y número 1 del tenis más joven de la historia.

Su triunfo en la final sobre el noruego Casper Ruud por 6-4,2-6,7-6(1), y 6-3 resultó un partido duro, pero el futuro campeón ya había jugado tres partidos maratonianos de cinco sets, y levantando bola de “match” contra Jannick Sinner.

El jugador de El Palmar le costó asimilar su triunfo, todo lo que había logrado en quince días de partidos de un Gran Slam, pero que en realidad fue ganado la final que obtuvo todos los logros.

Ahora a conservar el número 1 y seguir jugando partidos y deleitando a los miles de seguidores que ha logrado en poco tiempo que lo consideren un ídolo.

Montse Carreño, Septiembre-2022

Foto: Agencia.