Bollinger presenta La Grande Année 2008

Bollinger, está considera una de las más prestigiosas Maisons de Aÿ y una de las últimas que se mantienen independiente desde su fundación en 1829, durante casi 200 años ha producido un champagne con un estilo poderoso, sofisticado y complejo. Gracias a sus cualidades han sido elegidos por la Corona de Inglaterra y galardonados en 1884 con el sello royal de Garantía, que designa al proveedor oficial de la Corte.

La Grande Année 2008 es el reflejo del trabajo y la exclusividad de sus viñeados, un assemblage perfecto entre 71% de Pinot Noir y el 29% de Chardonnay provenientes de 18 cruces.

Fruto del savoir faire artesano de la Maison, para obtener un buen resultado vinifican exclusivamente en pequeñas barricas de roble antiguas, favoreciendo así el desarrollo de aromas de gran delicadez. Todo se realiza de forma artesanal, con un envejecimiento de más de 9 años sobre lías, culminando con el removido manual de cada botella.

“Producir cada una de ellas requiere paciencia y precisión. Solo es posible gracias al trabajo de las personas que conforman Bollinger, cuyos métodos artesanales se han transmitido de generación en generación”, ha afirmado Gilles Descôtes, Chef de Cave de Bollinger.

La añada 2008 revela una extraordinaria madurez de las uvas que, combinada con su acidez, dan un vino de profundidad infinita y una cuvée de excepción. La madurez se nota en sus delicados reflejos dorados que se mezclan con las notas afrutadas, especiadas y florales, en nariz. Su densidad y armonía en boca, convierten a este champagne en la joya gastronómica perfecta como maridaje de platos tan exquisitos como un plato de jamón curado Joselito.

Para esta nueva añada, la botella ha sido rediseñada, inspirada en la original de Bollinger de 1846 que aporta mayores beneficios para la calidad del producto.

La nueva añade de este exclusivo champagne sorprende por su densidad y estructura, así como por la complejidad y textura que acompaña hasta el final.

Montse Carreño, Mayo-2019