Dos leyendas, un perfume, Black XS Be A Legend
Durante los locos años 70, casi por azar, Iggy Pop y David Bowie (que por entonces era teclista en el grupo de Iggy) se cruzaron en el camino de la principiante Debbie Harry. Pop invitó a Blondie a tocar de telonero en sus giras y desde entonces no han dejado de ser amigos.
Se quieren. Desde las callejuelas de la jungla urbana que era Nueva York en los años 70 al backstage mugriento del CBGB, del underground de la América puritana al estrellato en los años 2000…En 1990 graban juntos “Well, Did You Evah!” un clásico de Cole Porter ya interpretado por Sinatra y Bing Crosby para un álbum en benéfico de la lucha contra el sida. ¿Quién mejor para encarnar la leyenda de un perfume que ha unido su historia a la del rock como una melodía se asocia a un riff de guitarra? Supervivientes de un tiempo pasado, emblemas de un modo de vida en vías de desaparición, abanderados de una música urgente, rabiosa, tremebunda, sinónimo eterno de una juventud hosca.
Años después, Paco Rabanne reúne de nuevo a estos dos iconos del rock para una campaña en blanco y negro. Incluso embutidos en un sobrio esmoquin irradian libertas: una chispa en la mirada, una ceja levantada, un ojo ennegrecido con khol, una camisa blanca que roza contra el satén del forro de una chaqueta negra…Lo clásico reinterpretado, el atractivo que nunca pasa de moda, la iconoclasia revestida de normalidad…Todo eso es Black XS. Todo eso son el Stooge y la Blondie, Debbie e Iggy.
Émilie Coppermann, que ha creado el nuevo jugo femenino, se preguntó ¿Qué hace la leyenda? Y la respuesta la tuvo enseguida: la rareza, la potencia, la pureza. Para la pureza era necesario permanecer fieles al ADN de esta fragancia fuerte y adictiva. Rosa Elèboro (la única rosa que florece en invierno), vainilla negra (femenina por esencia), pachulí (el aroma distintivo de la década de los 70: paz, amor y beatniks). Para reconectar con el aspecto sensual y magnético característico de la leyenda, la creadora se dirigió a Oriente y de allí trajo polvo de oud, oscuro y misterioso. Una fragancia potente y singular; el olor de la leyenda.
Para él, en esta ocasión Fabrice Pellegrin, es quien se ha imaginado el nuevo juego masculino ‘Black XS Be A Legend’, que huele a cuero, notas intensas y masculinas, que se ha combinado con aromas frescos. Limón y canela asociados con jara pirogenada. A la intensidad bruta, potente, masculina, del cypriol que ha añadido miel, que calma el efecto y juega con la ambigüedad, dando un toque de flor de azahar.
Para esta edición limitada ‘Be A Legend’, los frascos se han redondeado los ángulos, reavivado los colores. El púrpura de la fragancia para ella se hace más femenino con un rosa lacado, sublimado con una caligrafía negra a la tiza. La fragancia masculina conserva su estandarte negro pero adquiere un aspecto más mate, resaltado con un azul “Pop”.
Montse Carreño, Abril-2015
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