El Salón vuelve a amarrarse en el Port Vell
Con una exposición en el Port Vell de 125 barcos a flote y 525 embarcaciones en seco, mostró durante seis días (24 al 29 septiembre) las novedades de las principales marcas y las últimas tendencias en deportes náuticos.
En su 52 edición, el Salón Náutico de Barcelona, el más importante de España y uno de los más relevantes de Europa en su especialidad, generó negocio y numerosos contactos. "La gran mayoría de empresas expositoras han valorado muy positivamente su participación, esperando que muchas de las operaciones gestadas se cierren en los próximos meses", afirmó el presidente del Salón Náutico de Barcelona, Luis Conde, tras destacar que "también hemos logrado una buena afluencia de visitantes extranjeros, principalmente franceses, ingleses, alemanes y rusos con un alto poder adquisitivo, uno de los principales objetivos de este año para contrarrestar la atonía del mercado interior".
Según la organización pasaron por el certamen más de 53.000 personas, una cantidad que el director del salón, Jordi Freixas, valoró de forma muy positiva "pues demuestra la gran fidelidad de los visitantes, ya sean profesionales, aficionados o público en general". El salón, en el que han participado 236 empresas expositoras, revalido con gran éxito su doble condición de gran escaparate comercial y de foro de encuentro del sector de la náutica deportiva y de recreo en España.
El Salón Náutico fue inaugurado por el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, y fue visitado por el presidente de la Generalitat de Catalunya, Artur Mas; la ministra de Fomento, Ana Pastor; el secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Rafael Catalá; el alcalde de Barcelona, Xavier Trias; el conseller de Territori i Sostenibilitat de la Generalitat de Catalunya, Santi Vila; y el director general de la Marina Mercante, Rafael Rodríguez Valero, entre otras. En este sentido, Conde destacó que "desde el salón se ha impulsado la presencia de destacadas personalidades de diferentes administraciones que han podido pulsar las inquietudes y necesidades del sector".
Hubo propuestas para todos los gustos y edades, las cuales tuvieron una buena acogida de público, destacaron las exhibiciones de deportes náuticos, conferencias y presentaciones de regatas.
Entre las muchas actividades, hubo un desfile nocturno de barcos denominado “Boat Parade”, el viernes 27 por la noche que convirtió el Port Vell en una pasarela de moda muy original. Desfilaron una treintena de embarcaciones en medio de un espectáculo de luz y sonido que congregó a centenares de personas en el Portal de la Pau y la Rambla del Mar, los presentes esperaban para poder subir a los barcos y vivir por unos minutos la experiencia de navegar mientras veían las innovaciones en materia de diseño, tecnología, motores o servicio.
Más de mil niños y jóvenes pasaron por el Área Fun Beach, donde pudieron probar y ver demostraciones de los últimos productos que hay en el mercado para disfrutar del mar: motos de agua, tablas de paddle surf, kayaks.
Se pudieron ver embarcaciones de madera como el "Rafael", uno de los más viejos de este año y también uno de los más bonitos. Es una de las pocas barcas de mediana que todavía hoy en día surcan nuestras aguas y que fue construida para pescar a vela, y sólo con la fuerza del viento. Y no faltaron los tradicionales talleres sobre costumbres marineras.
Se aprovechó la ocasión para presentar diversos trofeos y regatas tan importantes como la Ruta de la Sal, Melilla Náutica, Euro Laser Masters Cup, Gran Prix del Atlántico y muchas más.
Pero lo que más llamó la atención y fue un éxito total fueron las exhibiciones de SUP, que este verano ya se pudo ver en las playas españolas y Flyboard, un "gadget" que permite al usuario volar sobre el mar, propulsado a 7 metros de altura.
Barcelona ciudad abierta al mar, demostró que vive el mundo náutico y marino con verdadero interés, tal vez por eso es admirada por otras ciudades de Europa.
Montse Carreño, 29-Septiembre-2013
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