Fernando Verdasco: “Soy de Ana, de nadie más”

El tenista madrileño cambio por unas horas la raqueta por un mazo y una cerveza para espitar el primer barril de cerveza que daba el pistoletazo de salida de la primera edición de la Paulaner Oktoberfest Madrid.

Con esta iniciativa ya no será necesario viajar a Múnich para vivir una de las fiestas más sonadas a nivel internacional porque, por primera vez, este festival traspasó fronteras y aterrizó en la capital española recreando a la perfección su localización original. Paulaner, su cerveza oficial, fue la encargada de que Madrid respirara, por unos días, pura esencia bávara.

Fernando Verdasco fue el padrino de esta inauguración tan especial, estaba feliz, tal vez la culpable sea Ana Boyer, con quien acaba de celebrar su primer año como pareja y lo celebraron con una cena romántica. Quiso emular al alcalde de Múnich, que cada año es el encargado de abrir el primer barril de cerveza, un emotivo acto que se replicó en Madrid “Estoy feliz y agradecido a Paulaner por hacerme partícipe de un evento de este calibre ya no solo en España, sino también a nivel internacional”.

Enamorado de Ana Boyer, no le da vergüenza reconocerlo. El balance a su lado ha sido muy bueno, mejor de lo que esperaba y eso que por sus torneos de tenis se ven poco “Yo creo que lo más importantes es compenetrarte bien con la otra persona, con una vida como la mía con tanto viaje, es muy importante que mi pareja, acepte que este mucho tiempo fuera de casa, -que no es fácil- , cuando estoy con ella nos lo pasamos bien, reímos mucho que al final es lo que te da la felicidad”.

Van despacio, no conviven juntos, pero el tiempo que tienen lo aprovechan para estar juntos, el tenista está seguro de sus sentimientos por ello no le importa hablar abiertamente de ellos. Ana reúne las cualidades que Fernando destaca de su pareja “Lo simpática que es, cariñosa, familiar, las cosas que a mí me gustan de una mujer y que realmente creo que yo también soy así. Es una chica muy madura para la edad que tiene, muy centrada y muy profesional”.

Añadió “Soy muy familiar y me gustaría casarme y tener hijos. Veo a Ana como la única candidata a ser la madre de mis hijos a día de hoy”.

Sus respectivas familias no se conocen pero están encantados con esta relación. Fernando es uno más en casa de Isabel Preysler “es una persona increíble, conmigo se porta muy bien, no puedo tener más que palabras buenas para ella y su familia”.

Respecto a la Copa Davis, comentó “no solo es una triste noticia para España sino para nosotros los tenistas. La Davis me ha dado muchísimo, nunca podré olvidar lo ocurrido en Argentina”.

Una vez inaugurada la Oktoberfest, se empezaron a servir los 80.000 litros de cerveza Paulaner, las 35.000 salchichas, 7.000 codillos y 14.000 pretzels preparados para la ocasión. Lógicamente solo se sirve auténtica Paulaner OktoberBier, que se fabrica especialmente para este evento, como en Múnich. Es una de las pocas certificadas por cumplir el Reinheitsgebot, cervezas que tienen un mínimo de 6% de alcohol y que han sido elaboradas dentro de los límites de la ciudad de Múnich pueden ser servidas en el genuino Oktoberfest.

Junto a las míticas jarras de litro se pudo disfrutar de una selección de comida alemana preparada por los especialistas de los restaurantes La Fábrica, que trajeron todos sus productos directamente desde Alemania.

La decoración, los trajes, la cerveza, la comida típica y la música en vivo hizo que todos los presentes se sintieran como verdaderos bávaros ¡Un gran fiesta!.

Montse Carreño, 17-Septiembre-2014