Invictus y Olympéa Aqua

Estas dos fragancias, que se crearon para el hombre y la mujer prosiguen su éxito este año, lanzando Invictus y Olympéa con Aqua. La inspiración divina bajo el signo del agua, en la que el frescor y la sensualidad alcanzan el punto más álgido.

Son los mitos del héroe y la diosa según Paco Rabanne. ¿Cómo olvidar a esta pareja a la que nada ni nadie se puede resistir? Desafiando a los dioses en su propio territorio. En el 2013 nació Invictus. Ganador infatigable, dios vivo, calibrado para la victoria. Con un aroma amaderado entre frescor mordiente y sensualidad animal. Posteriormente, en 2015 se creó Olympéa. Reina divina sobre tacones de aguja ante la que el mundo entero se rinde. Su aura no deja impasible, su perfume le devuelve el poder a las mujeres con su aroma a vainilla salada carnal, turbadora. Pero el diseñador Paco Rabanne sigue creando más aromas y en el 2017 surgen Invictus y Olympéa Intense. Un desafío para un héroe en la cima de su potencia y una diosa en su apogeo. Con su sensualidad que sube de tono y una intensidad magnética.

Pero en este 2018 sale un nuevo elemento el Aqua. En el corazón de Aqua, existe la potencia del agua, que es indomable para el común de los mortales pero no para los semidioses.

Aqua-Ganador. Océano desatado. Desafío absoluto para un héroe que no renuncia jamás. Enfrentarse a las olas para extraer de ellas una nueva fuerza.

Aqua-Diosa. Olympéa está al mando. Domina el agua en su inmensidad. Poder divino .. Dominar los elementos e irradiar luz. Una nueva odisea para la Venus moderna.

Los frascos son victoriosos. Para él es un trofeo, copa de vidrio macizo. Metal plateado azulado para el tapón. Degradado en azul para el jugo, del más intenso al más claro. Abismos hacia la luz. Para la diosa, el nuevo frasco es acorde con el conjunto de la gama (Olympéa y Olympéa Intense). La inspiración es la misma: un círculo de vidrio solar rodeado por una corona de hojas de laurel. El frasco ha sido sutilmente replanteado, con nuevas líneas más depuradas: femenino, luminoso y moderno. Una silueta afinada, ligeramente curvilínea, y todo ello con una fineza recuperada en los detalles, como hojas de laurel delicadamente reinterpretadas, tapón coronado con una cúpula cristalina.

Para esta versión Aqua, el frescor es radiante. Reflejos de oro rosado para los laureles. Degradado en rosa el jugo, del más intenso al más solar.

Describir lo que representa Aqua es decir una inmersión en los abismos. El paroxismo del frescor. Profundo, intenso, doblemente sensual. Maderas ambarinas para él mientras que para ella es vainilla salada. Y para ambos, la famosa nota “piel salada” aportada por el acorde de ámbar gris.

Frescor colosal y sin tregua para Invictus Aqua. Potencia de maderas incorporadas en sobredosis. Una ola yodada que explota rompiendo sobre maderas ambarinas ultravibrantes. Un choque olfativo firmado por Nicolas Beaulie et Juliette Karagueuzoglou. Frescor solar de una flor cítrica para Olympéa Aqua. Profundidad carnal de la vainilla y de la madera de Cachemira. Una ola de sensualidad ambarina en torno a un acorde de “vainilla salada” intenso y adictivo. Duelo acuático firmado por Loc Dong y Fanny Bal. Y concentración inédita con la Eau de Parfum Légère para aportar una intensidad duradera.

Los famosos que son imagen a las fragancias son Nick Youngquest, cuerpo de Apolo magníficamente tatuado. Mirada azul acerada y sonrisa seductora. Se puede decir que es un nuevo Neptuno. En la vida real es un australiano de 33 años, exjugador de rugby, y en estos momentos es modelo y profesor de yoga. Para la de mujer, es Luma Grothe, tiene una belleza felina de mirada hipnótica y gracia olímpica, Una Venus moderna. Nacida en Brasil, Luma tiene raíces alemanas, japonesas y africanas. Con 24 años, ya ha desfilado para grandes marcas y ha sido portada.

Montse Carreño, Enero-2018