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Irina Shayk, embajadora de ‘Scandal A París’

Irina Shayk, embajadora de ‘Scandal A París’

La modelo Irina Shayk entra a formar parte del universo de Jean Paul Gaultier. Se ha convertido en la embajadora de la nueva fragancia del diseñador francés ‘Scandal A París’.

La fragancia de Jean Paul Gaultier representa a una mujer libre, poderosa, fuerte e inteligente, fiel reflejo de la arrollada personalidad de Irina Shayk. Ella misma ha declarado sentirse una mujer fuerte “Nunca he conocido en mi vida a una mujer que no sea fuerte. Yo creo que nosotras, las mujeres, estamos hechas para ser fuertes”.

Para el diseñador, a la mujer Scandal “no le importa lo que digan los demás. Siempre me gustaron las mujeres fuertes que no se molestan por los juicios de valor que la sociedad puede hacer sobre ellas”.

En palabras del propio diseñador, una fragancia “es como una prenda, es algo que llevamos en nuestra piel, crear algo tan personal e íntimo es una experiencia maravillosa”. Exuberante como la miel, jugosa como la pera y vibrante como el jazmín. Así es ‘Scandal A París’, la fragancia que revolucionará todas las fiestas.

Irina Shayk asegura que trabajar al lado de Jean Paul Gaultier “es un sueño hecho realidad, nunca hubiera imaginado que a los 33 años me uniría a esta marca icónica”. Para la modelo, la firma es una casa “legendaria, sin miedos, poderosa, escandalosa, bonita y ¡sexy! Hay un hombre detrás de la marca, con una rica historia vital, un hombre que no tiene miedo de romper las barreras en la vida, que quiere y encuentra la belleza en todo y puedes sentir su presencia en todo lo que él crea”.

El nuevo perfume ya está a la venta y mantiene su original frasco, muy femenino y sensual: unas piernas eternas al aire, que podrían ser perfectamente las de su embajadora. El frasco tan rosa como alegre. La despreocupación en un frasco. El tapón, con las piernas por el aire, como si estuviera a sumergirse en un gran baño nocturno, aquel en el que todos se acaban mojando.

El estuche lleva la esencia de París en una caja. Tan embriagador, tan empolvado, tan aterciopelado… Rosa como el amor y rojo como la lujuria. Al abrir la lata ya se sabe que encierra un escándalo.

En el anuncio televisivo se puede ver a una mujer que revoluciona el ambiente al irrumpir en un restaurante parisino. Los clientes se quedan perplejos al contemplar a esa mujer con esas piernas de infarto, y una americana negra. Los más comedidos se preguntan “¿Quién es esa mujer?”, otros, lo tachan de escándalo, y ni se molestan en esconderlo. Pero a ella no le importa lo más mínimo. Se dirige a la mesa que ocupan Jean Paul Gaultier y Rossy de Palma, una pareja que no se escandaliza nunca de nada.

La misión de la modelo es dejar la estela de su perfume ‘Scandal à París’ e intentar que esa noche, la ciudad de la luz brille con toda su fuerza.

Con un sentido del humor único y un aire extranjero pero con una picardía muy parisina, Irina Shayk es perfecta para encarnar a la nueva heroína Scandal. ¿Quién mejor que ella?.

Montse Carreño, Abril-2019