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L’Air du Temps se deja vestir por Nina Ricci y Antoninette Poisson con su propio jardín de palomas

L’Air du Temps se deja vestir por Nina Ricci y Antoninette Poisson con su propio jardín de palomas

Existen pocos perfumes que se puedan considerar iconos y L’Air du Temps creado en 1948 es uno de ellos, con su néctar floral especiado.

Creado en el júbilo del periodo de posguerra, esta fragancia etérea que combina jazmín, rosa, gardenia y clavel especiado, es todo un símbolo de paz y libertad. Unos valores encarnados por las palomas posadas sobre sus célebres volutas.

Y como los mitos adoran reinventarse, Nina Ricci presenta en edición limitada firmada por Calice Becker y diseñada en colaboración con Antoinette Poisson.

Creada en 2012 por un trío de restauradores de patrimonio, la maison A Paris chez Antoinette Poisson ha hecho resurgir un saber hacer olvidado: la dominotería. Esta técnica del siglo XVIII consiste en imprimir papeles decorativos por hojas a partir de planchas grabadas, antes de darles relieve a mano con la ayuda de plantillas.

Con motivos geométricos o de inspiración botánica, cada uno de los papeles pintados de Antoinette Poisson se produce utilizando el método original. Una celebración de la artesanía de estilo francés tan apreciada por Nina Ricci. Por no hablar de ese otro vínculo evidente que une a las dos maisons: su amor por la poesía.

Si L’Air du Temps tuviera que representarse con un único símbolo, sería su pareja de palomas, frágiles y etéreas, que se posan sobre el frasco. Para esta edición limitada, Antoinette Poisson se inspira en ellas, diseñando un motivo exclusivo de palomas que dan vueltas en un mundo floral.

El diseño es un homenaje a un savoir-faire puramente francés: el de la toile de Jouy, un tejido nacido en Jouy-en-Josas a mediados del siglo XVIII, reconocible por sus bucólicas decoraciones monocromáticas llenas de poesía. Una tela apreciada por Antoinette Poisson, que ha creado un estampado estilizado amarillo y dorado, que se reproduce hasta el infinito en un frasco lacado blanco con aspecto de porcelana. Un guiño a la tradición aderezado con un delicioso toque de modernidad.

El Eau de Parfum es también inédito. Nina Ricci ha confiado a la Maestra Perfumista Calice Becker la tarea de reinterpretar su emblemático néctar, conservando a su vez sus rasgos distintivos.

Evocando la porcelana, esta fragancia floral luminosa y sensual es más cremosa y deslumbrante que L’Air du Temps original. En la primera inspiración, el yuzu, fresco y revitalizante forma una alianza radiante con las bayas rosas. Después, permite que se expresen las notas aterciopeladas y solares de nardo, jazmín e ylang ylang, formando un ramo cuya riqueza se realza con un fondo envolvente, casi lácteo, compuesto de sándalo y almizcle.

 L’Air du Temps resurge con una nueva luz, deslumbrante de sensualidad.

Como contrapunto al tumulto mundano, L’Air du Temps  recuerda que los sueños y la poesía son más que nunca parte de la época en la que vivimos. Celebrar la belleza de la naturaleza y la eternidad de los instantes suspendidos no es un signo de ingenuidad sino un manifiesto.

Montse Carreño, 11-Marzo-2021