Òpera Samfaina, arte y cocina

El pasado verano inauguró la heladería Rocambolesc en La Rambla, y ahora le ha tocado el turno a Òpera Samfaina, que se encuentra ubicado en los sótanos del Liceo. La entrada es por la heladería de Jordi Roca, se bajan unas escaleras y lo primero que han realizado es una Vermuteria para preparar al visitante, se pueden degustar olivas variadas y tapas.

La protagonista sensorial es la olivera y el tesoro que esconde: el aceite de oliva. La decoración tiene formas orgánicas, con maderas nobles laminadas y una barra de diseño único con formas fluidas.

En este lugar se le entrega al visitante una pulsera electrónica en la que se acumulan las consumiciones que se hagan en los diferentes espacios, de este modo, el pago de lo consumido se hará a la salida.

Los espacios están bien diferenciados, aunque unidos, el lugar más singular es L’Odissea, ya que la gastronomía se llena de arte audiovisual, y a la inversa. La mesa la componen 16 comensales que puede gozar de un maridaje de vinos y productos catalanes escogidos por los hermanos Roca, y al mismo tiempo sumergirse en una historia de imágenes, sonidos y colores que se mezclan con cada degustación, convirtiendo en una sorprendente aventura sobre la leyenda de Catalunya.

Es un nuevo concepto de montaje sensorial inmerso que fusiona arte y gastronomía por medio de la animación y con las técnicas más modernas de luz y sonido. La banda sonora esta creada por reconocidos artistas e interpretada por la orquesta y el Cor del Gran Teatre del Liceu.

El pasaje de los Diorames es la alternativa a la entrada directa por l’Odissea. Sirve para visualizar la curiosa historia con la que Òpera Samfaina quiere construir una nueva realidad a través de la imaginación, la interacción con el visitante y el abandonamiento de los cánones establecidos. Está compuesto de seis obras animadas creadas con técnicas mixtas que combinan escultura, pintura, mapping, creaciones sonoras, metal y madera.

Se deja la aventura mítica catalana y se puede come en La Diva, si lo que se desea son platos elaborados, cocina y espectáculo. Es la zona más grande donde hay cuatro mesas temáticas y en este lugar existe un Menú Degustación de 8 platos y dos bebidas. Cada plato se combina con diferentes proyecciones. Son mesas redondas que en el centro está el camarero para guiar a los comensales utilizando los cinco sentidos.

La Diva se completa con la Barra de Cerveza, la Barra de Vinos (para poder degustar todas las Denominaciones de Origen catalanes) y la Barra Solidaria, es un proyecto del local que por el momento cuenta con la implicación de grandes chef como Jordi Roca, Carles Abellán, Nandu Jubany, Albert Adrià y Christian Escribà. Las tapas que se han sido creadas por ellos sirven para recaudar fondos para entidades como el Casal dels Infants del Raval y la Fundació Joan Salvador Gavina.

Paralelamente, los hermanos ¨Roca, en colaboración con Tast Barcelona, destinan los beneficios de su participación a L’Odissea a Metges Sense Fronteres.

Y por último, se encuentra el Mercado, lugar donde el visitante puede gozar del producto en sí mismo, en un entorno singular. Está dividido en cinco partes: El Sotamar que representa lo que hay debajo de una barca de pescadores. Un mar de resina translucida moviéndose al ritmo de las olas. Una escultura giratoria que da homenaje a la anchoa. Proyecciones interactivas de peces que reaccionan al gesto del visitante. Un expositor que replica una Venus renacentista, donde probar productos del mar; Les Espérides es un espacio que hace que los visitantes se embelesen. Debajo la figura bailan las trigéminas guardianas de este frondoso jardín de frutas y verduras, elementos clave de muchas recetas catalanas como la coca de recapte o la sanfaina; La Matança contempla un caballo chamuscado, un héroe con la cara Jordi Roca, una Hespèride convertida en doncella y un dragón tricéfalo con cara de cerdo. La muerta del dragón de Sant Jordi se representa aquí como una explosión alimenticia. Al clavarle la lanza, el héroe de Òpera Samfaina hace surgir de las entrañas del dragón todo un mundo de embutidos hechos y pintados a mano; En el Catalàctic se encuentra el mundo del queso y productos lácteos. El impacto visual lo produce una vaca con entrañas transparentes por las que fluye leche en circuito cerrado. El lomo del animal mecánico está lleno de paisajes por los que circula un tren eléctrico. El expositor presenta el mobiliario de una masía en miniatura, lugar que relaciona el queso con su producción artesanal arraigada en la tierra. Sobrevuelan las cabezas de los visitantes miles de vacas en miniatura; Dolça Catalunya es el fin de una fiesta popular. La tradición de los capgrossos confluye en este espacio donde se degustan dulces en sus formatos más clásicos. Un icono de la tradición catalana como es el caganer, protagoniza la atracción de la feria que invita a acertar en la boca del capgròs una bola de goma. Si se consigue, el capgròs caga un bombón creado por Jordi Roca “la Tifa” que también está a la venta en la Botiga, lugar donde termina la experiencia del lugar y dónde es posible comprar los productos típicos catalanes que protagonizan todo el recorrido.

El lugar dispone de 950 m2, que después de la explicación queda claro que están repartidos en seis zonas diferenciadas y trabajan 70 personas que son profesionales de los diferentes servicios.

Existen varios objetivos para crear un lugar tan especial, tanto el diseñador, Franc Aleu como los hermanos Roca tienen claro que quieren fusionar gastronomía, ocio y cultura en una experiencia de surrealismo, montaje escénico y tecnología, y eso es, Ópera Samfaina.

La historia, el paisaje y los productos culinarios de toda Catalunya son los protagonistas, junto con el propio visitante, de un recorrido pensado de un punto de vista que rompe estereotipos. El acceso es a través de un túnel donde el color y las texturas acompañan al espectador y comensal. Vidrieros, ceramistas, maderos, actores, diseñadores, cineastas, músicos y por supuesto cocineros, forman parte de una experiencia que utiliza la técnica moderna y la plasticidad artística para reinterpretar los símbolos identitarios del hecho catalán.

Muchas personas piensas cómo es que le han puesto este nombre al lugar, pues la explicación es bien sencilla: La Samfaina es una receta que se basa en la mezcla de ingredientes, en el amalgama de colores y sabores. Es un plató muy ligado a las raíces de Catalunya y hace honor a la técnica del sofrito. Todo eso se une a la perfección con un concepto que pretende fusionar cultura, arte y gastronomía en un espacio que permite la interacción de todo unido.

El motivo de la convocatoria de este día es dar a conocer es presentar la idea que han pensado que consiste en promocionar y dar a conocer algunos de los productos y platos singulares de la comarca gerundense y que estará en carta hasta Semana Santa, posteriormente le seguirán las otras provincias, Lleida y Tarragona.

Los encargados de preparar estos platos han sido Josep Maria Massó del restaurant bEAuTy (trinxat de la Cerdanya amb col d’hivern), Anna Casadevall de La Xicra (suquet de Calella de Palafrugell), Montserrat Fontané madre de los hermanos Roca (fricandó de vedella de Girona), y Anna Sans de la pastelería Sans (els Bisbalencs). De aperitivo pusieron la anchoa de L’Escala y destacar que la madre de los hermanos Roca no pudo estar presente pero envió un video de cómo cocinaba su fricandó, el resto estuvieron para explicar detalles de su receta, ya que los buenos chef no lo explican todo, se guardan sus secretos.

Un barcelonés se sentirá orgulloso de ver como un nuevo espacio lúdico se abre a la ciudadanía.

Un catalán alimentará su orgullo (en el más estricto sentido de alimentar) viendo el producto de su región llegando a la excelencia.

Y un visitante tendrá la oportunidad de conocer y valorar una cultura y un sentir diferencial propio de tierras catalanas, que se expresa de forma única y en un lugar singular, a través del diseño, la creatividad y la degustación.

Se quiere consolidar este espacio para que muestre la cocina catalana con sus sabores y sus texturas en los productos, en todo el mundo.

Montse Carreño, 20-Febrero-2017