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71 Oyster Bar y La Perla, doble propuesta

71 Oyster Bar y La Perla, doble propuesta

En el número 71 de Enrique Granados, actualmente una de las calles con más bares, restaurantes y lugares de ocio de Barcelona, se ha instado un nuevo local con dos propuestas para paladares sibaritas. Al entrar se ve una barra con taburetes es el  71 Oyster Bar, donde sirven los frutos del mar y en la trastienda, está La Perla, una coctelería con aires vintage.

Su especialidad son las ostras, los tartars y los ceviches, lugar perfecto para los amantes de estas delicias del mar. Ofrecen una selección de las mejores ostras francesas y otros deliciosos bocados marinos, acompañados de los mejores cavas, vinos y champagnes.  En su barra de mármol ofrecen al cliente un showcooking. Cuidan con esmero sus productos estrellas,  se pueden degustar ostras de Marennes Oleron y Normandía con una gran variedad de condimentos a elegir. Una selección de ensaladas frescas y bien condimentadas. Distintos ceviches, tartars y King crabs y para los amantes de la carne el steak tartar y el lomo bajo de buey. No se puede terminar una buena comida sin un buen postre, ofrecen postres caseros, destacando el Cheescake y el Caramel.  Si se hace un juego de palabras, se puede decir que al comer una ostra se puede aparecer una perla, y ese es el nombre de la cocteleria “clandestina” que está en la trastienda, evoca el ambiente de la Ley Seca y sus mejores cócteles.

Al final de la barra, existe un enorme espejo, en su lado izquierdo hay una puerta que al abrirla el cliente se encuentra con un pasillo que lleva a un viaje a la época de la Ley Seca: La coctelería La Perla con una estética muy cool, mobiliario vintage, iluminación sugerente y una carta de cócteles llenos de historia y sorpresas. Han querido crear un club clandestino inspirado en la estética y el ambiente de los speakeasy de la Ley Seca, de los años 20. Un refugio lleno de encanto en donde su bartender, el veneciano, afincado en Barcelona, Marco Vian, está preparado para crear el mejor cóctel.

Al mediodía se puede comer un menú ejecutivo o menús degustación y, por la noche se especializan más en las ostras, los tartars y los ceviches y después a degustar un cóctel como pueden ser margaritas, negronis, Dry Martinis u Old Fashioned, entre muchos otros, siempre recetas clásicas elaboradas con un toque de frescura y modernidad.

Montse Carreño, Octubre-2018